Roberto Genta Dorado (rgentadorado@hotmail.com) Cel. 00598 098 500418

sábado, 24 de septiembre de 2011

Ajeno

(a Roberto Genta Dorado).


Oh pobre de ti.
apenas tienes palabras
ocupándolo todo.

Unas pocas palabras
que no te pertenecen.

martes, 31 de mayo de 2011

*

.

Infinito
está construido
por infinidad de infinitos.

Hacia adentro
y hacia afuera.

Si es que hay un adentro y un afuera.

.

martes, 5 de abril de 2011

Algo abandonado

.

Nace la noche.
Espada muda de licor.

En calles adoquinadas, húmedas,
nace la noche y te busca en los hoteles;
en las crines fatigadas del viento;
en la entrepierna
te busca.

Somos algo abandonado en una cama.

Algo que se alimenta de silencio;
que en silencio bebe su pócima terrible
y lanza gritos que nadie escucha.

La noche nace
como algo triste que se inclina.

.

Revisando el cajón del escritorio

.

Ya hemos sido lo que mañana,

lo que escurre el vacío

en el pasado que espera.

Doblamos el sobre -la misma fotografía-

(más pequeña o para siempre invisible).

Imagen que se ahoga en la emulsión de plata.

(Desgastándose en paredes) la misma fotografía

que se ha quedado con años, aromas, cosas.

Tus ojos dibujándose bajo la superficie de ácidos.

Tus ojos que vuelven.

Una copia, dos, cien copias.

No importa.

Solamente hubo una fracción de tiempo

en la que mi mano oprimió el disparador

y congeló todo para siempre.

.

viernes, 18 de marzo de 2011

Autorretrato

.

Oh esa mesa, esos cubiertos,
las cintas de plata, el metal bruñido.
La cama deshecha en hechos de la noche;
el olor a tabaco por las sábanas.
(Ese cilicio: las imágenes que toman cuerpo).
La mentira de la poesía que nos muerde.
Algo que nos persigue. Nos atrapa.
Deshuesa; quita cartílagos.
(Carcasa de poeta austral al sur instalado).
También el lenguaje (otro cilicio).
Soga en el cadalso que el viento mece.
Burla encadenada.

Blanco móvil.
Veloz serpiente entre las manos.

jueves, 17 de marzo de 2011

FUKUSHIMA

.

Invisible como el amor,
la muerte.

.

sábado, 26 de febrero de 2011

AUTO DE FE

.
No descubras, que puede no haber nada. Y nada no se vuelve a cubrir.
Antonio Porchia.
.


Escribo en el fuego una música que regresa para decirme que no estoy, que solo veo palabras luminosas en los labios que aquella tarde pintaron los míos y luego limpiaste con pañuelos que ahora descubro; debajo hay algo así como una manzana que no es una manzana: es una paloma muerta con forma de borboleta clavada con alfileres y cubierta por un nylon / por el perfume de tu piel aquella tarde sobre la que escribiría en el centro de una música lejana y entonces mis manos temblaron cuando comprendí que solamente lanzo alfabetos que tu abanicas con pañuelos perfumados y que tienen la silueta de esa mariposa cayendo y cayendo en el silencio de la noche.

miércoles, 16 de febrero de 2011

*

.

Un ala.
Solamente una para cruzar el valle.

.

lunes, 14 de febrero de 2011

Tarea

.

Hiero sombras.

Quito telarañas de los ojos.

Escondido en la caverna,
cerca del fuego,
aguardo el beso del silencio.

martes, 25 de enero de 2011

*

Estoy temblando.
Hubo caricias;
miel en los labios.

Puede que mañana no
y se haga piedra la flor.

domingo, 9 de enero de 2011

Enclave

(en clave)

a J.M.


.
El vale todo del lenguaje.
Versos que verduguean lo vernáculo.
Que esconden tu cerrojo cerrado con cieno celeste.
La estafa/ la voltereta amanerada de la mujer
que sin red se hunde y nos dispara.
Ya no borda su tela.
Escupe letras/ las funde y se confunde.
Piensa que Dios le habla.
(Arco a regla en otra versión posible)
Pide limosna por las calles. En todas las calles.
Cuzco rabón raboneado.
Palabras pide.
Poesía pide.
La gente va de prisa/ no hay monedas/ no hay billetes;
no los hay, Baudelaire. No los hay, César.
Excomulgado, cagado por los perros.
En marzo la Liebre baila con el Buey traidor.
Una verga de lenguaje.
(La rata de la locura te ha ido bebiendo
hasta que ayer asomó por tu boca/
Villa Carmen y después... )
atravesando el último gollete del último embudo:
libros en danza por la siestita montevideana.
Así se fue la vida
bordando la tela única/ túnica.
Arco a regla en otra aversión.
(Ya no cuentas hasta once.)
Ya no cuentas, Jorge.
Aquitrabando montas sin montura tu clave imposible.
No es el cielo un escondite ni un código mayor
para un cazador de lluvias.
Es la rosa del manicomio.
Esta mierda que se pega en los dedos como una telaraña
que araña la maraña de palabras.
Palabras de nadie.
El golpe seco desde el fondo de la nada.
Las palabras dicen lo que dicen y no más.
Sábelo: Sólo caerá en su vacío.

(Y llegan los enfermeros)


.

jueves, 11 de noviembre de 2010

Pánico a bordo

.
Han muerto los teléfonos
y ningún timbre responde.

En tu puerta transparente
manipulas objetos que no existen.

(Soy algo que se mueve y se desliza.)


La ráfaga
o los labios.

Algo de ti me pertenece.

lunes, 25 de octubre de 2010

*

.

No existe la poesía.

Si existe
no se la puede tocar.

Si se la toca
se disuelve en el aire
de las palabras.

.

martes, 19 de octubre de 2010

*

.

no escribo el poema

escribo para no morir
para no llenar el paisaje
de teléfonos
pies desnudos
y ramas secas

para que nadie diga
con disimulado pudor:
la noche dormía en sus ojos

no escribo el poema

dibujo una cárcel de tinta
para no respirar el aire sucio
de la madrugada

.

Soplo de noche

.

Soplo de noche el pasado.

Habitado por labios,
apaciguado por el timbre modulado de una voz
fue convertido en aliento,
en sueño compartido que no pude compartir.

Sonido en la noche profunda.
Caricia que viene del tiempo
y que debo aceptar
como se acepta la lluvia, el amor y el trueno.

Soplo de noche el pasado.

Voz que en la penumbra
se reconoce y escucha.

domingo, 19 de septiembre de 2010

Presente

.

Desde ahora podar y podar.

Hasta el último minuto.

Hasta que no quede nada.

lunes, 13 de septiembre de 2010

El baile de las máscaras

.

Algo pasó algo
temblaba en el aire
un perfume
lágrimas de Dios gastando la piedra
que es ella misma
piedra Dios lágrima
haciéndose flor en la sangre.

Sombra que dibujas en el cielo.
Sombra del cuerpo en que habitas,
con el que invitas/ a la fiesta.

(La muerte es la única fiesta).

La manzana que vemos, la vida
hundiéndose en la mesa,
baba verde/ negra/ transparente:

líquido azucarado.

La magdalena.

Una servilleta.

El sonido de aquella cuchara.

Adolescencia

.
Tienes que dormir.
Adornar tu cuello
con campanas de sal
y lágrimas de miedo.

No despiertes, Ximena. No despiertes.

Alguien cuelga imprevistas flores
en las ramas de los árboles.

¿De qué pez inmóvil han hecho el aire?
¿De qué sueño?

domingo, 12 de septiembre de 2010

Inasible

. (a Laura Alonso)

La palabra
que no buscas
te sigue
intima
detrás de ti corre
cae
sólo palabra sola
bajo el sol de tu noche
-palpitando la sinrazón-
leve zumbido que huye
escapa
la que en otras se esconde
grita
dice que no existe
sangra
jazmín que en tus dedos tiembla
usurpa
y sólo es la que nunca
nunca
podrás escribir.

lunes, 6 de septiembre de 2010

Desapalabrar

.

Desapalabrar.

Desdoblar recuerdos.

Imiginar un mundo sin nada.

Olvidar el dolor;
los besos que nos dimos.

Despalabrarlo todo.

Desordenar encuentros; andamiajes de luna.

La poesía fue desdoblar misterio.

Imaginar un mundo sin nada.

Transitar oscuros
la lenta música del sueño.



.

sábado, 7 de agosto de 2010

Escapar

.

no se puede

se intenta
se cae
se besa

se busca el signo
la señal de la noche

nadie pueder ver sus ojos
sentir los labios
escapar

en la noche digo
en la caricia

con su ojos dentro
perderse

.

jueves, 29 de julio de 2010

Laboreo

.

Entre la sombra y su objeto
la distancia es inasible.

El poema es sombra
de un objeto que no existe.
Un lugar imposible. Un no-lugar.

La sombra de una idea. De una letra.
De una fibra de sinrazón.

El sitio exacto
donde nace la telaraña
con la que sus ojos atan
los locos.

.

miércoles, 28 de julio de 2010

Bemol

(a Lucio Muniz)

No hay otra cosa. Hay
música que espera
en la sangre. Música
que ríe y llora
atravesando sombras.

Late el silencio
en notas negras, sin tono.

In crescendo.


.

Aureático

.

Esas campanas
que buscarán los ojos,
sólo en ti tañen.

.

lunes, 26 de julio de 2010

La otra casa de la luna

No busques no digas
que hay cielo sin nube.
Sin nube rota.

La tierra se abre
y para que yo avance
te abres rota nube;
te abres.

Sangra el cielo.
Sangra.

.

Herida

Sin llegar llego
al borde de la herida
de quien fue estrella en el camino.

(En mi camino de fiebre hacia la noche).

El viento desteje aquel beso;
la herida/ su recuerdo.

Sangran los cristales rotos
por el pájaro
del miedo.


.

Azar

Juegas al azar con el espanto
y me buscas en la sangre de tu sangre.

Con ojos,
con música me buscas.

Con estrellas húmedas de noche.

Con la perla que escondes en la mano.

Con olor de hembra enfurecida
avanzado en la marea de mí cuarto.

Con pezones de música te abres;
estrella encadenada.

Azar de espanto.

Animal que hueles y me hueles.

Estás buscando.


.

La ausente

Siempre espero a la que no regresa.

Entre libros y papeles.
En la música que perfuma el aire.
Anclado en la noche y desandando el día.
Como un insecto lento en la penumbra.
En el rincón más húmedo del mundo.
Besando palabras en el aire
y mordiendo loco el silencio.

Espero.


.

domingo, 25 de julio de 2010

*

(para Selva Casal)


hay dos mundos ocupando el mismo lugar:
el de la realidad y otro que repite nuestro miedo
o hay dos mundos: el de las anticipaciones
y éste en que escribimos lo escrito
en el que bebemos de un vino que ya no existe
donde damos muerte a la muerte


.

El otro perro

(para Paula Enöider)


Hay un perro en el poema.
Ladra escondido entre palabras.
Sobre sí gira y cae
a un pozo que no termina
no
hasta que el eco devuelve estrellas.

El golpe seco.

Un sonido
desde el fondo de la nada.


.